El color del revestimiento no solo afecta el aspecto visual de tu piscina, sino también la temperatura del agua, la percepción de profundidad y la armonía con tu jardín o terraza.

  • Tonos claros (celeste, blanco):
    Dan sensación de frescura, limpian visualmente el agua y reflejan más luz. Ideales para patios pequeños o ambientes modernos.
  • Tonos oscuros (azul profundo, gris, negro):
    Absorben más calor, lo que puede ayudar a calentar el agua naturalmente. Brindan un efecto tipo espejo elegante y contemporáneo.
  • Tonos arena o piedra:
    Combinan con jardines naturales, terrazas rústicas y ambientes cálidos.
  • Considera el entorno:
    Piensa en los colores del piso, muros, vegetación y muebles al elegir tu paleta.

El color ideal depende del estilo que buscas, la orientación solar del patio y tu gusto personal.

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